Estrellas errantes, de Gema Bonnín

 ¡Muy buenas!

Hoy os traigo una historia con la que navegaremos entre las estrellas hacia planetas desconocidos. Quiero hablaros de Estrellas errantes, de Gema Bonnín.

En el sistema Qantus, dos planetas comparten órbita y están poblados por humanos. Tásidar es un mundo avanzado que domina la ciencia y la tecnología, Mitsval es todo lo contrario. Las relaciones diplomáticas avanzan llenas de dificultades que se multiplican cuando en ambos planetas se producen atentados simultáneos con reivindicaciones diferentes y armas que podrían proceder del contrabando.

Niki Rendix es una contrabandista de Tásidar a la que acusan de participar en uno de los atentados. Cuando huye perseguida por Lux Kentaurus, sargento de la Guardia Nebular, un incidente los deja en Mitsval sin otra alternativa que la de colaborar para salir de ese entorno inhóspito.

Mientras, en la capital de Tásidar se decide el porvenir de ambos mundos con la visita de Palvidia Rin, la soberana más importante de Mitsval. Su propósito es conocer a los que podrían llegar a ser sus aliados... o, por supuesto, sus enemigos.

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Gema Bonnín nació en Valencia en 1994, pero se crio en Mallorca. En 2012 publicó su primera novela, La dama y el dragón, y unos meses después se fue a vivir a Qatar. Desde entonces, ha viajado por muchos países de Asia, entre ellos China, Sri Lanka, Singapur y Japón. Actualmente compagina la escritura con traducciones de libros de Star Wars y de Marvel. Cuenta con estudios de filología inglesa por la Universidad Complutense de Madrid y formación complementaria tanto en historia como en literatura por las universidades británicas de Exeter y Oxford. Ha publicado libros como la bilogía Legado de reyes, la de Arena roja, Lo que el bosque esconde y El jardín de hierro. Estrellas errantes es su nueva novela, una historia de ciencia ficción.

Como siempre aviso, esta reseña no contiene spoilers. Aquí solo me limito a dar una visión mía sincera y siempre con respecto de la lectura en cuestión. ¡Allá vamos!

De esta autora se ha dado el caso de que tengo todos sus libros y no había empezado a leer ninguno (soy lo peor). ¡Así que había que ponerle remedio! Esta historia me llamó de primeras por su portada, y luego por la sinopsis me terminó de animar a hacerme con él y leerlo. Es una novela de ciencia ficción, con una fuerte carga política.

La ambientación ya os adelanto que es una pasada. Nos encontraremos en un sistema en el que comparten órbita dos planetas habitados por humanos, y no pueden ser más diferentes el uno del otro. Tásidar es un planeta como el nuestro, con grandes avances tecnológicos y una sociedad bastante más avanzada, donde sus habitantes tienen una gran esperanza de vida y se manejan conceptos como la democracia o la libertad. Por otro lado está Mitsval, un planeta regido por la soberanía totalitaria de un imperio formado por varios reinos menores, con un modo de vida más propio del feudalismo.

Me ha encantado cómo ha descrito los diferentes aspectos de cada planeta, dándoles una identidad propia a cada uno, con un montón de detalles que me ha impresionado mucho en este sentido. Creo que el worldbuilding está muy bien trabajado.

La trama gira en torno a una importante decisión que deben tomar los dirigentes de cada planeta: ¿cooperativismo o autonomismo? La primera consistiría en una relación mucho más estrecha entre ambos planetas, permitiendo que la tecnología e ideales del planeta Tásidar entren en la sociedad de Mitsval de forma oficial, influyendo más directamente en sus gentes. La segunda permitiría que ambos planetas tuviesen sus diferencias, cada uno por su lado sin que uno se inmiscuya en los asuntos del otro.

En este aspecto la historia se me ha hecho un poco más pesada de lo que pensaba, ya que incide mucho en el ámbito político de estos dos planetas, con bastantes discursos y debates acerca de la libertad, de expresar ideas, de la esclavitud, de lo bueno y lo malo que tiene cada una de esas dos corrientes políticas... El tema político no me entusiasma, por lo que al final el ritmo para mí se me hacía muy lento al no haber apenas acción salvo al final de la historia, en la que sí habrá más movimiento en general por parte de los personajes.

Hablando de los personajes, hay tres principales en esta historia. En primer lugar tenemos a una princesa llamada Rin, procedente del planeta de Mitsval, en quien recaerá una importante decisión. Me ha parecido una chica sensata, dispuesta a escuchar a los demás y no dejarse influenciar. Luego están Niki y Lux, una contrabandista con un oscuro pasado y un Guardia Nebular (una especie de policía espacial) que está decidido a dar con ella. Ella me ha parecido muy valiente y él alguien que ha pasado por mucho dolor en su vida, cargando durante demasiado tiempo con la culpa de esa pena.

Lamentablemente, no he llegado a sentir una conexión con ninguno de los tres personajes. Creo que el peso de la historia recae tanto en la situación de ambos planetas, que llegó un punto en el que los personajes me resultaron indiferentes y sus historias personales, bajo mi punto de vista, pierden toda la fuerza. Aclaro que esto es una opinión personal, en absoluto debe ser considerado como algo general.

Durante la historia se deja entrever una relación romántica de forma muy superficial entre dos de los personajes principales, pero debido a mi sensación final con éstos, la relación romántica no me ha inspirado nada, en general, siento que me hubiera dado igual si no se hubiese producido. Aun así, os comento que esta relación de amor no es en sí relevante, ni tampoco pastelosa.

El libro está compuesto por un total de cincuenta y cinco capítulos, con un pequeño prólogo que nos mete en situación y un epílogo que transcurre tiempo después de los acontecimientos finales. Los capítulos son de extensión más bien irregular, es decir: hay algunos que son más cortos y otros que son más largos. En general, la pluma de la autora es un acierto porque se expresa con mucha claridad, describiendo con gran detalle los escenarios, y la lectura es fluida en ese sentido.

Respecto al final, para mi gusto personal, no me ha gustado. No es un mal final, ojo, en absoluto. Cierra el nudo principal, y aunque deja algún que otro cabo suelto, no me ha resultado molesto. No me ha gustado porque no era del todo lo que esperaba. Eso sí, me ha sorprendido cierta parte del final, que no vi venir. Pero por mi parte, no es un final que me haya encantado especialmente.

La edición es preciosa, ya podéis ver por su portada, y además contamos con ilustraciones de los tres personajes principales al final del libro. Me gustaría hacer un apunte de cara a futuras reimpresiones: mi edición, al menos, tiene un párrafo entero en el capítulo 52 repetido. Por supuesto, esto al ser algo que se puede solucionar enseguida, no es algo negativo. Solo es un apunte ya que, al toparme con esta repetición, me ha sorprendido.

También me hubiera gustado encontrar algún mapa o guía al inicio del libro, porque hay tantos nombres nuevos y tan extraños de oídas que al principio me confundía un poco. Esto es puro capricho mío, igual que el mapa, ya que me encanta ver dónde está situada cada ciudad dentro de cada planeta.

Y ya que nos plantea tanto este libro qué movimiento político sería el mejor (cooperativismo o autonomismo), voy a posicionarme tras haber leído el libro: personalmente, me inclino hacia el autonomismo, pues el discurso del líder de esa corriente de pensamiento me convenció frente al de la líder de la corriente contraria. Ojo, qué corriente de pensamiento triunfa al final es algo que tendréis que descubrir vosotros.

Estrellas errantes es una historia con la que viajar hacia las estrellas, a descubrir nuevos mundos. ¿Podrán estos llegar a cooperar juntos, o la relación será imposible entre ambos, tan diferentes el uno del otro?

3/5

¿Os ha llamado la atención? ¿Lo habéis leído?

¡Nos vemos en la próxima entrada!