La llama en la niebla, de Renée Ahdieh

 ¡Muy buenas!

Os traigo una reseña mejorada de un libro que ya leí hace un tiempo, y ahora he vuelto a releer. Quiero hablaros de La llama en la niebla, de Renée Ahdieh.

Mariko siempre ha sabido que, como hija de un importante samurái, su único propósito en la vida era casarse. Aunque su astucia rivalice con la de su hermano y, como a menudo le recuerdan, su físico no sea muy femenino.

En cuanto cumple diecisiete años, su familia la envía al palacio imperial para que conozca a su prometido. No obstante, la reunión no llega a producirse debido a un inesperado obstáculo: en el viaje, un clan de mercenarios ataca la comitiva y ella es la única superviviente.

Disfrazada de joven campesino, Mariko se infiltra entre sus atacantes para averiguar quién ordenó su asesinato. Pero lo que descubre junto a sus peligrosos compañeros va mucho más allá de lo que esperaba.

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Renée Ahdieh ha pasado parte de su vida en Corea del Sur, aunque en la actualidad reside en Carolina del Norte. En 2015 publicó con gran éxito La ira y el amanecer (Nocturna, 2017), una reinterpretación de Las mil y una noches cuya trama concluye en La rosa y la daga (Nocturna, 2017), que próximamente será llevada al cine por la productora Imagine Entertainment. Con La llama en la niebla (Nocturna, 2018) inicia otra exitosa serie ambientada en el Japón feudal que nada más publicarse entró en la lista de más vendidos del New York Times.

Como siempre digo, en esta reseña no vais a encontrar spoilers de ningún tipo, por lo que podéis leer sin miedo alguno. Así pues, ¡allá vamos!

Esta es la primera parte de una bilogía, ya completa en español y a cargo de la misma editorial, ambientada en el Japón feudal y con buenas dosis de aventura y fantasía. La segunda parte se llama El humo en el sol, por si queréis informaros mejor de esta saga. Personalmente, todo lo que tenga que ver con Japón, China, Corea y demás me llama la atención, así que había llegado el momento de releer de nuevo esta novela para volver a ese mundo místico lleno de espíritus, samuráis y muchos secretos.

La ambientación, como os adelantaba, nos traslada al Japón feudal, sin una fecha determinada puesto que no estamos ante una novela histórica como tal, sino más bien ficticia. Al final del libro tenemos el añadido de un glosario con varios términos en japonés con su significado, para que resulte menos lioso entender dichos términos cuando aparecen en el libro a la par que resulta instructivo conocer varias de esas palabras. Personalmente, no lo he usado mucho porque termina haciéndome perder el hilo de la lectura si tengo que estar yendo y viniendo todo el tiempo, pero esto es una opinión personal.

En relación a la ambientación como tal, esta me ha parecido muy bien trabajada y realista, quitando lo que es la parte fantástica, claro. Lo que quiero decir, es que la actitud de los personajes y el contexto en el que se mueven me han parecido bastante realistas a lo que debió ser aquella época en lo referente a la sociedad y demás.

La trama, por otra parte, está bastante relacionada con lo que vendría a ser el origen de los ninjas, o al menos, el origen de éstos en esta novela. Además, está cargadísima de intrigas palaciegas, muchos secretos entre los personajes, y varias escenas de acción que mezclan lucha con magia sobrenatural. 

En general, me ha mantenido en vilo constante pese a que es una primera parte y, por tanto, suele ser más introductorio todo. Eso sí, quizás en algunos momentos se narraba todo con cierta rapidez que me impedía alcanzar a comprender del todo algunas acciones por parte de los personajes.

Los personajes, hablando de estos, me han llamado mucho la atención porque considero que tienen luces y sombras, que no son ni del todo buenos ni del todo malos, sin excepciones. Algunos, incluso, llegan a darte la sorpresa al no ver venir sus intenciones hasta el último momento.

La principal protagonista es Mariko, una joven inconformista que se mete en demasiados problemas constantemente debido a su carácter. Empaticé rápido con ella, además de que es una chica que va aprendiendo poco a poco, mostrando una evolución a lo largo del libro.
Respecto a los demás personajes, reconozco que, a veces, me sentía un poco confundida con los nombres, pero al final acabas identificando con facilidad a todos los que de verdad son importantes.

En este primer libro habrá una relación romántica entre la protagonista y otro de los personajes principales, que va surgiendo poco a poco desde la enemistad inicial hasta la atracción. Me ha gustado mucho cómo ha ido evolucionando la relación entre estos dos personajes, pese a que entre ambos aún hay muchos obstáculos que superar, que seguramente se traten en el segundo libro.

El libro está estructurado en capítulos sin numeración, solo con una palabra o frase, lo que hace difícil determinar cuántos capítulos tiene. Estos, sin embargo, se me han hecho muy cortos y han pasado casi volando, pues la pluma de la autora es muy cuidada, recreándose un poco en las descripciones para sumergirte más en ese mundo oriental. La traducción, por mi parte, ha estado igualmente muy bien.

Hablando del final, este deja en un punto determinante en la historia que hace que me muera de ganas por continuar para saber qué harán los personajes con los peligros que los acechan. Quedan aún incógnitas por resolver, así que sin duda es necesaria la segunda parte y pienso ponerme con ella enseguida.

La llama en la niebla es el inicio de una bilogía repleta de misterios con un toque sobrenatural en un Japón feudal donde los peligros acechan en cualquier parte.

4/5

¡Y hasta aquí la reseña!

¿Habéis leído este libro? ¿Os llama la atención?

¡Nos vemos en la próxima entrada!